¿Qué es la conexión social y por qué es esencial para sobrevivir?

Conexión social

La conexión social es una herramienta fundamental para regular nuestro sistema nervioso y generar seguridad en momentos de incertidumbre. Nuestro sistema nervioso se corregula con las emociones de los demás, especialmente en situaciones de estrés. En este artículo exploraremos qué es la conexión social, por qué buscamos conectarnos y cómo fortalecer esta capacidad.

¿Qué es la conexión social?

La conexión social es nuestra capacidad para regularnos emocionalmente a través de la interacción con otras personas. Ante una situación de amenaza o incertidumbre, tendemos a buscar en el otro una señal de seguridad o calma que nos ayude a regular nuestras propias emociones. Este fenómeno refleja cómo nuestro sistema nervioso central se «corregula» con el sistema nervioso de las personas que nos rodean, siempre que estas estén tranquilas y seguras.

Seguridad y conexión: un ejemplo en la vida real

Imagina que estás en un avión y comienza una turbulencia. Lo primero que haces es mirar a tus familiares o a la azafata para leer en sus expresiones si la situación es segura o no. Puedes incluso dar la mano a alguien cercano, buscando regular tu ansiedad mediante la conexión con los demás. Esta tendencia a observar las reacciones de otros y apoyarnos en el contacto social es una forma de sentirnos seguras y tranquilas.

¿Cómo construimos la seguridad a través de la conexión social?

Como seres sociales que somos y mamíferos también, nuestra prioridades como especie son sobrevivir y reproducirnos. En ese sentido, los otros son necesarios para ambas cosas. Por eso, la seguridad es tan importante, porque lo contrario implicaría amenaza para nuestra supervivencia.

La teoría de la conexión social nos enseña que la seguridad no se construye en aislamiento, sino en interacción con los demás, especialmente a través de la comunicación no verbal:

  • Expresiones faciales
  • Tono de voz
  • Postura corporal

 

Estas señales no verbales nos ofrecen indicios sobre la seguridad de una situación. Además, el nervio vago desempeña un papel crucial en esta conexión, ayudando a nuestro cuerpo a reaccionar de manera calmada y a evitar la activación del sistema simpático de lucha o huida, lo cual permite ahorrar energía y oxígeno.

La importancia de sentirnos seguras en el presente

La seguridad solo puede experimentarse en el presente. Cuando nos sentimos seguras, es cuando realmente podemos explorar, aprender, jugar y conectar tanto con nosotras mismas como con los demás. Este estado de conexión nos permite vivir de manera plena y auténtica, sin estar constantemente en alerta o bajo el efecto de los desencadenantes del pasado.

¿Por qué buscamos conectar?

Desde las neurociencias afectivas, se sabe que el contacto social y el autocuidado amoroso fortalecen nuestra resiliencia. La resiliencia, en este contexto, es la capacidad de adaptarnos y recuperarnos emocionalmente ante situaciones difíciles. Cuando activamos nuestro nervio vago a través de la conexión social, generamos una sensación de seguridad y calma, lo cual también ayuda a fortalecer nuestro sistema inmune y prevenir enfermedades.

Tips para activar el nervio vago y mejorar la conexión social

Fortalecer el nervio vago es una forma efectiva de mejorar nuestra capacidad de conexión social y, por ende, nuestra resiliencia. Aquí algunas estrategias para lograrlo:

  • Respiración profunda y consciente: Practicar la respiración lenta y profunda activa el nervio vago y reduce el estrés.
  • Cantar o tararear: Estimula el nervio vago y genera una sensación de calma y bienestar.
  • Movimiento y estiramientos suaves: Actividades como yoga o tai chi promueven la activación vagal y mejoran la conexión con el cuerpo.
  • Socializar en entornos seguros: Pasar tiempo con personas que nos aporten calma y seguridad es una excelente manera de activar el nervio vago.
  • Expresiones faciales y contacto visual: Mirar a los ojos a las personas de confianza genera una sensación de conexión y seguridad.

 

La conexión social es esencial para regular nuestras emociones y construir un sentido de seguridad interna. A través del nervio vago, nuestro cuerpo tiene la capacidad de buscar y generar calma en la interacción con los demás, lo cual es vital para nuestra salud física y emocional. Aprender a activar el nervio vago no solo fortalece nuestra resiliencia, sino que también nos permite disfrutar de una vida emocionalmente más rica y equilibrada. Sin embargo, quiero resaltar que para conectar con otros, es necesario estar conectadas con nosotras mismas y estar en el momento presente. Si has vivido traumas, sufres de ansiedad u algún otro padecimiento, esto puede dificultarse y puede que sea necesario realizar un proceso de terapia. Si quieres intentarlo, escríbeme.

 

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